Cómo hacer Leche de Almendras

La leche de almendras es una alternativa vegetal nutritiva y versátil a la leche de vaca. Preparar leche de almendras es fácil y solo requiere unos pocos ingredientes.

LECHE DE ORIGEN VEGETALFÁCIL DE HACER

Lourdes Rodríguez

2/27/20256 min leer

Breve Historia de la Leche de Almendras

La leche de almendras tiene raíces antiguas que se remontan a siglos pasados. Se cree que se originó en Oriente Medio y las regiones mediterráneas, donde se han cultivado almendras durante miles de años. El registro más antiguo conocido de la leche de almendras se remonta al siglo IX, en particular en las regiones de habla árabe. La leche de almendras se usaba comúnmente como sustituto de los productos lácteos en épocas en las que era difícil conseguir leche fresca, especialmente en épocas de calor, donde los productos lácteos se estropeaban rápidamente.

En la Europa medieval, la leche de almendras se convirtió en una alternativa popular a la leche de vaca, especialmente durante los períodos de ayuno religioso, cuando se restringían los productos animales. En la Edad Media, era la favorecida como "leche" para los monjes durante la Cuaresma u otras celebraciones religiosas, donde se abstenían de productos animales. Como era de origen vegetal, se la consideraba una opción permitida.

La popularidad de la leche de almendras siguió creciendo a medida que la gente buscaba alternativas de origen vegetal, especialmente con el auge del veganismo, la concienciación sobre la intolerancia a la lactosa y el interés por las dietas sin lácteos en el siglo XXI.

Beneficios para la Salud de la Leche de Almendras

La leche de almendras es una alternativa vegetal nutritiva y versátil a la leche de vaca. Algunos de sus beneficios para la salud incluyen:

  1. Baja en calorías: la leche de almendras es baja en calorías en comparación con la leche de vaca, lo que la convierte en una excelente opción para quienes buscan reducir la ingesta de calorías.

  2. Sin lactosa: dado que la leche de almendras es de origen vegetal, naturalmente no contiene lactosa, lo que la convierte en una excelente alternativa para las personas con intolerancia a la lactosa.

  3. Rica en nutrientes: la leche de almendras suele estar fortificada con vitaminas y minerales, incluidos calcio, vitamina D y vitamina E. Estos nutrientes son esenciales para tener huesos fuertes, reforzar el sistema inmunológico y la salud de la piel.

  4. Salud cardíaca: la leche de almendras contiene grasas saludables (grasas insaturadas), que son beneficiosas para la salud cardíaca. Las grasas monoinsaturadas ayudan a reducir los niveles de colesterol malo y pueden reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.

  5. Rica en antioxidantes: las almendras están repletas de antioxidantes, especialmente vitamina E, que ayuda a proteger las células del estrés oxidativo y favorece la salud de la piel.

  6. Bueno para controlar el peso: La leche de almendras puede ser una buena opción para controlar el peso, ya que tiene pocas calorías y no contiene las grasas saturadas que se encuentran en los productos lácteos enteros.

  7. Promueve la salud digestiva: La leche de almendras es fácil de digerir y es suave para el estómago, lo que la convierte en una excelente opción para las personas con sistemas digestivos sensibles.

  8. Puede ayudar a controlar el azúcar en sangre: Dado que la leche de almendras tiene un bajo contenido de carbohidratos, tiene un efecto mínimo en los niveles de azúcar en sangre, lo que la convierte en una excelente opción para las personas que controlan la diabetes.

Receta de Leche de Almendras

Preparar leche de almendras casera es fácil y solo requiere unos pocos ingredientes. Aquí tienes una receta sencilla para empezar:

Rinde: 3-4 porciones

Ingredientes:

1 taza almendras crudas

3-4 tazas agua filtrada (según la consistencia deseada)

1-2 Cdas. edulcorante (opcional): jarabe de arce, agave, dátiles sin hueso o miel

1 cdta. extracto de vainilla (opcional)

Instrucciones:

  1. Remojar las almendras: Colocar las almendras en un bol y cubrirlas con agua. Dejar en remojo durante al menos 12-24 horas. Esto ablanda las almendras, lo que facilita su licuado y da como resultado una leche más cremosa.

  2. Escurrir y enjuagar: Después de remojarlas, escurrir y enjuagar bien las almendras.

  3. Licuar las almendras: Añadir las almendras remojadas a una licuadora de alta velocidad, junto con 3-4 tazas de agua (según qué tan espesa o líquida quieras la leche). Si quieres endulzar la leche con dátiles deshuesados, agrégalos ahora. Licúa a velocidad alta durante 1 o 2 minutos, hasta que las almendras estén completamente mezcladas y el líquido luzca suave.

  4. Cuela la leche: para separar la leche de almendras de la harina de almendras, usa una bolsa para leche de nueces, un colador de malla fina o una estopilla. Coloca el colador o la bolsa sobre un tazón grande, vierte la mezcla licuada a través de él y presiona para extraer la mayor cantidad de leche posible.

  5. Endulza y condimenta (opcional): si quieres leche de almendras endulzada, agrega el endulzante que desees (como jarabe de arce o miel) y extracto de vainilla a la leche y revuelve para combinar.

  6. Almacena: transfiere la leche de almendras a un frasco o botella sellados y refrigera. Durará de 3 a 4 días. Asegúrate de agitarla antes de usarla, ya que puede separarse naturalmente con el tiempo.

Nota:

  • Si estás usando leche de almendras en recetas y quieres una textura más cremosa, puedes mezclar algunos anacardos o avena remojados con las almendras antes de colarla. Esto creará una leche más espesa.

  • La leche de almendras es una bebida nutritiva, sin lácteos y versátil que se puede utilizar de innumerables maneras, desde cocinar hasta hornear o beber sola. Ya sea que esté evitando los lácteos o simplemente buscando una alternativa más ligera, la leche de almendras es una opción fantástica.

  • Fortificar la leche de almendras casera con calcio, vitamina D y vitamina E es una excelente manera de aumentar su contenido nutricional y convertirla en una alternativa más completa a la leche de vaca. Dado que la leche de almendras casera no contiene naturalmente cantidades significativas de estos nutrientes.

  • Después de hacer la leche de almendras, queda una harina de almendras húmeda o pulpa de almendras que se puede usar de diversas maneras en lugar de tirarla. Puede secar la harina de almendras y usarla para hornear o como relleno para otros platos.

Sugerencias Sobre Cómo Servir la Leche de Almendras

La leche de almendras es increíblemente versátil y se puede disfrutar de muchas maneras:

  1. En café y té: usa leche de almendras como crema para tu café o té. Agrega un sabor suave a nueces que combina bien con mezclas de café o té. Es especialmente deliciosa en café con leche y capuchinos.

  2. Licuados: la leche de almendras es una base excelente para batidos. Combínala con frutas, verduras y proteína en polvo para un desayuno saludable o una bebida para después del entrenamiento.

  3. Horneado: reemplaza la leche de vaca por leche de almendras en recetas de productos horneados como muffins, pasteles y panqueques. Funciona bien en la mayoría de las recetas y agrega un sabor sutil a nueces.

  4. Cereales o avena: vierte leche de almendras sobre tu cereal favorito o mézclala con tu avena para una alternativa cremosa sin lácteos.

  5. En postres: usa leche de almendras en postres como pudines, helado o pudín de semillas de chía. Proporciona una textura rica sin lácteos.

  6. Platos salados: La leche de almendras también se puede utilizar en platos salados, como en sopas, salsas o guisos a base de crema, como una alternativa sin lácteos a la crema espesa o la leche.

  7. Chocolate caliente: Prepare un reconfortante chocolate caliente sin lácteos mezclando leche de almendras con cacao en polvo, un edulcorante y una pizca de vainilla.

  8. Batidos: Licúe la leche de almendras con helado o fruta congelada para obtener un batido refrescante sin lácteos.

  9. Como bebida: Simplemente beba leche de almendras sola, fría o calentada con una pizca de canela para disfrutar de un reconfortante capricho.

¿Quién Debería Evitar la Leche de Almendras?

Aunque la leche de almendras se considera generalmente segura para la mayoría de las personas, hay algunos grupos que deben ser cautelosos o evitarla:

  • Alergia a los frutos secos: Las personas con alergia a las almendras deben evitar la leche de almendras, ya que puede desencadenar reacciones alérgicas que van desde síntomas leves como urticaria hasta anafilaxia severa.

  • Personas con deficiencias nutricionales: Si se consume leche de almendras como principal alternativa láctea, asegúrese de que esté fortificada con nutrientes esenciales como calcio, vitamina D y B12. Sin fortificación, puede no proporcionar nutrientes adecuados, especialmente para los veganos.

Importante: Si tienes dudas sobre incorporar este alimento a tu dieta, siempre es buena idea consultar con tu dietista o médico.